En un giro sorprendente que ha revolucionado el mundo de la lucha libre, Paul Heyman, el legendario “Wiseman” de la WWE, sorprendió a los fans el 22 de marzo de 2025 al aparentemente traicionar a Roman Reigns y aliarse con CM Punk durante un caótico enfrentamiento en SmackDown . El evento, que se desarrolló en vivo en Bolonia, Italia, ha dejado al Universo WWE lidiando con las implicaciones de la aparente traición de Heyman a “The Tribal Chief” y su inesperado giro a “The Best in the World”. A las 5:54 p. m. PDT de hoy, la comunidad de la lucha libre sigue entusiasmada con el dramático enfrentamiento, y se especula mucho sobre lo que esto significa para el camino a WrestleMania 41.

La noche comenzó con Roman Reigns, ex Campeón Universal Indiscutible de la WWE, de pie en el ring junto a Heyman, abordando las consecuencias de sus recientes acciones. Reigns había regresado en el Raw anterior en el Madison Square Garden, interfiriendo en una lucha en jaula de acero entre CM Punk y Seth Rollins, atacándolos en un ataque de ira. Ese momento reavivó la tensión del Royal Rumble, donde Punk eliminó a Reigns y Rollins aprovechó la situación con un brutal ataque. Esta noche, Reigns prometió recuperar su dominio, invitando a cualquiera con un problema a confrontarlo cara a cara, un desafío lanzado por Heyman la semana anterior en Barcelona. Pocos podrían haber predicho el caos que seguiría.
Entró CM Punk, quien irrumpió en el ring sin perder tiempo, micrófono en mano y mirada ardiente. El público de Bolonia estalló en cólera cuando Punk, estrella de Raw en una inusual aparición en SmackDown , le recordó a Reigns su complicada historia, que se remonta al reinado de 434 días de Punk como campeón de la WWE entre 2012 y 2013, cuando Reigns debutó como parte de The Shield bajo la tutela de Heyman. Punk acusó a Reigns de abandonar a Heyman durante su ausencia el año pasado, dejándolo vulnerable a la facción rebelde Bloodline de Solo Sikoa. “Estuve ahí para Paul cuando tú no”, declaró Punk, insinuando un favor que Heyman le debía por su alianza en Survivor Series: WarGames. La tensión era palpable, pero nadie anticipó lo que vendría después.

Mientras Reigns y Punk se enfrentaban, Seth Rollins se unió a la refriega, escalando la situación hasta un empate a tres bandas. Rollins, aún furioso por la interferencia de Reigns en su combate en jaula, juró acabar con los sueños de WrestleMania de ambos. El trío intercambió pullas y puñetazos, mientras el público coreaba pidiendo una lucha de triple amenaza en el Showcase of the Immortals. En medio del caos, la actitud de Heyman cambió. En un momento que se repetirá durante años, se interpuso entre Reigns y Punk, aparentemente para mediar, solo para susurrarle algo al oído a Punk antes de retroceder con una sonrisa pícara. Punk entonces atacó a Reigns con un GTS, dejando a “El Jefe Tribal” desplomado en el ring mientras Heyman observaba con aprobación.
La traición dejó atónito a Reigns, quien se puso de pie con dificultad, fulminando con la mirada a su asesor de toda la vida. Heyman, micrófono en mano, se dirigió al público por primera vez esa noche. “Roman, me dejaste a mi suerte”, dijo con la voz cargada de veneno. “CM Punk estuvo ahí cuando tú no. La lealtad no es una calle de un solo sentido”. Las palabras marcaron un cambio radical: Heyman, quien había sido la voz y estratega de Reigns desde 2020, le dio oficialmente la espalda al hombre al que había elevado a alturas sin precedentes. El público de Bolonia rugió de júbilo cuando Punk y Heyman se plantaron uno al lado del otro, una alianza renacida de su pasado histórico.
El cambio de Heyman a heel no es del todo inédito. Conocido por su astucia y oportunismo, ya ha cambiado de bando anteriormente, como el de Punk por Brock Lesnar en 2013. Sin embargo, este cambio se siente diferente, con implicaciones personales. La ausencia de Reigns después de WrestleMania 40 dejó a Heyman sometido a brutales ataques del equipo de Sikoa, que culminaron en un asalto que rompió la mesa en el Madison Square Garden. El papel de Punk en la protección de Heyman durante ese periodo, y su reclutamiento para WarGames, parece haber forjado un vínculo que superó su colaboración de cinco años con Reigns.
Las consecuencias ya dominan las conversaciones en X, con los fans divididos entre la sorpresa y la emoción. “Que Heyman se vuelva contra Roman por Punk es la mejor narrativa”, publicó un usuario, mientras que otro se lamentó: “Reigns no se merece esto después de todo lo que han construido”. El enfrentamiento prepara el terreno para un posible éxito de taquilla en WrestleMania 41, con Rollins probablemente en una triple amenaza. Reigns, ahora aislado, enfrenta una ardua batalla para recuperar su imperio sin su Wiseman.
Para Heyman, este es un regreso a sus raíces como mente maestra manipuladora, un rol que ha desempeñado desde sus días en la ECW. Para Punk, es una oportunidad de aprovechar el ingenio de Heyman en busca de un evento principal de WrestleMania, largamente anhelado. A día de hoy, el panorama de la WWE ha cambiado drásticamente: Roman Reigns se mantiene solo, y el sorpresivo cambio de Paul Heyman a heel ha asegurado que todas las miradas estarán puestas en esta saga en desarrollo.