El último rival de Ferrari en la F1, el SF-25, ha generado una tormenta de entusiasmo después de que se filtraran los resultados de pruebas recientes, lo que sugiere una transformación radical que podría poner a la Scuderia nuevamente a la vanguardia de la batalla por el campeonato. Después de que Charles Leclerc y Lewis Hamilton probaran por primera vez el auto prácticamente nuevo, las primeras reacciones del equipo de Maranello fueron abrumadoramente positivas, alimentando las especulaciones de que Ferrari finalmente puede haber descifrado el código para un auto candidato al título.
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Durante un reciente shakedown en Fiorano, Leclerc completó 100 kilómetros de pruebas, ofreciendo sus primeras impresiones del manejo y el equilibrio del coche. Según se informa, el piloto monegasco expresó optimismo sobre el rendimiento del SF-25 y destacó mejoras significativas con respecto a su predecesor. En la sesión de la tarde, Hamilton tomó el volante para una vuelta extendida de 200 kilómetros, subrayando aún más el compromiso de Ferrari de garantizar que ambos pilotos estén completamente integrados en el nuevo auto antes de la temporada 2025. El movimiento estratégico señala un cambio importante en el enfoque de Ferrari, que enfatiza el trato igualitario de su alineación repleta de estrellas y maximiza los conocimientos sobre el rendimiento de ambos competidores.
Lo que hace que el SF-25 sea particularmente intrigante es su rediseño casi total: solo el 1% de sus componentes permanecen sin cambios respecto al coche de la temporada anterior. Bajo una nueva dirección, que incluye al director técnico de chasis Loïc Serra, Ferrari realizó cambios agresivos, incluido el cambio a una suspensión delantera con barras de tracción, un concepto tomado de McLaren y Red Bull. Una aerodinámica actualizada, unos pontones rediseñados y una nueva estructura de alerón trasero señalan aún más un alejamiento de la filosofía de diseño tradicional de Ferrari en busca de un mayor rendimiento. Aunque a primera vista estos cambios pueden no parecer revolucionarios, los cambios subyacentes en la geometría mecánica y la gestión del flujo aerodinámico sugieren una experiencia de conducción fundamentalmente diferente.
Para Hamilton, esto marca el comienzo de un nuevo capítulo largamente esperado. El siete veces campeón del mundo habló con entusiasmo de su integración en el equipo, describiendo la pasión y la dedicación de Ferrari como “increíbles”. Su entusiasmo por el SF-25 sugiere la posibilidad de que Ferrari haya entregado un coche capaz de desafiar el dominio de Red Bull. Con ambos pilotos empujándose mutuamente al límite, Ferrari se ha posicionado como un serio contendiente para la temporada 2025.
Una de las mayores dificultades de Ferrari en los últimos años ha sido la inconsistencia en el ritmo de clasificación y de carrera, particularmente en la gestión de los neumáticos. El rediseño del SF-25 tiene como objetivo abordar estas debilidades optimizando su ventana operativa para garantizar una mayor estabilidad durante períodos prolongados. Los datos del simulador sugieren una mejora de medio segundo respecto al coche anterior, lo que coloca a Ferrari en una posición competitiva frente a McLaren, que también ha hecho grandes avances con su MCL39. Sin embargo, dada la capacidad de Red Bull para extraer el máximo rendimiento incluso del tercer coche más rápido de la parrilla, el mayor desafío de Ferrari todavía puede estar en la ejecución estratégica y el desarrollo durante la temporada.
El panorama más amplio para 2025 prevé un campo cada vez más competitivo, con McLaren emergiendo como otra gran amenaza. Sus innovaciones, que incluyen una suspensión delantera antihundimiento y un chasis revisado, podrían alterar el status quo y desafiar a Ferrari por el segundo lugar detrás de Red Bull. Sin embargo, la decisión de Ferrari de invertir fuertemente en el SF-25 en lugar de centrarse únicamente en los inminentes cambios de regulación de 2026 sugiere que están decididos a hacer una declaración esta temporada.
Con Leclerc y Hamilton alineados en su respuesta, favoreciendo una respuesta en curvas más agresiva y un mejor comportamiento del tren delantero, Ferrari finalmente podría tener un auto que se adapte a ambos estilos de conducción. La verdadera prueba, sin embargo, llegará cuando comience la temporada en Bahréin. Si el SF-25 está a la altura de las expectativas, Ferrari podría estar preparado para una de sus campañas más competitivas desde su último triunfo en el campeonato en 2007.
La pregunta sigue siendo: ¿será este el año en que Ferrari finalmente ponga fin a su sequía de campeonatos? Sólo el tiempo lo dirá, pero las primeras señales sugieren que el Cavallino Rampante podría estar listo para atacar nuevamente.