El FC Barcelona ha dado un paso audaz en el mercado de fichajes de verano con la incorporación de dos figuras de talla mundial: Luis Díaz y Thomas Partey. El nuevo entrenador azulgrana, Hansi Flick, ha manifestado públicamente su entusiasmo por estos fichajes, describiéndolos como un “salto cualitativo” para el proyecto deportivo del club.
Luis Díaz, extremo colombiano procedente del Liverpool, es conocido por su velocidad, regate explosivo y capacidad para desequilibrar en el uno contra uno. Su llegada aportará dinamismo y profundidad a un ataque culé que busca reinventarse tras una temporada de altibajos. Con solo 28 años, Díaz se encuentra en el punto más alto de su carrera y ha sido uno de los jugadores más destacados en la Premier League en los últimos años.
Por otro lado, Thomas Partey, mediocampista ghanés del Arsenal, es una apuesta estratégica para reforzar el centro del campo. Su presencia física, capacidad de recuperación y experiencia en competiciones de élite como la Champions League lo convierten en una pieza clave para el esquema de Flick, que busca equilibrio y solidez en el medio.
Según fuentes del club, ambos fichajes fueron solicitados directamente por Flick, quien los considera perfiles ideales para implementar su estilo de juego intenso, vertical y tácticamente disciplinado. “Estoy feliz. Díaz y Partey no solo tienen calidad, sino también mentalidad ganadora. Estoy convencido de que harán una diferencia real para este equipo”, declaró el técnico alemán en rueda de prensa.
La operación para traer a ambos jugadores ha sido posible gracias a un esfuerzo económico significativo por parte del club, que sigue trabajando para cumplir con las normativas del fair play financiero. Se estima que el coste combinado de ambos traspasos ronda los 70 millones de euros, aunque parte del pago podría haberse estructurado mediante variables y objetivos a cumplir.
Con estos refuerzos, el Barça demuestra que va en serio. Hansi Flick ha comenzado su etapa en el club con un mensaje claro: se vienen cambios profundos y ambiciosos. La afición ya empieza a ilusionarse con un equipo competitivo que vuelva a luchar por todo en la temporada 2025–2026.