El Universo WWE aún se recupera de los electrizantes eventos de WrestleMania 41, donde impactantes traiciones e intensas rivalidades prepararon el terreno para lo que promete ser un nuevo y explosivo capítulo en la lucha libre profesional. En el centro de la controversia se encuentra Randy Orton, el 14 veces campeón mundial, quien ha declarado públicamente su intención de vengar a su antiguo protegido, Cody Rhodes, tras un polémico momento con John Cena. El arrebato de Orton, “¡Hablas demasiado, Cena!”, ha desatado la especulación y la anticipación entre los fans, con la Víbora poniendo la mira no solo en la venganza, sino también en el codiciado Campeonato de la WWE.
La saga comenzó durante el evento principal de WrestleMania 41, donde Cody Rhodes, el actual campeón de la WWE, defendió su título contra John Cena en un combate anunciado como un choque generacional. Rhodes, quien ha sido la cara visible de la WWE desde que consiguió el campeonato, estaba en plena racha tras superar a numerosos retadores. Cena, una leyenda que regresaba y 16 veces campeón mundial, representó la prueba definitiva. El combate fue un intercambio brutal, con ambas superestrellas poniendo a prueba sus límites físicos. Sin embargo, los momentos finales dieron un giro inesperado cuando una distracción en el ringside permitió a Cena aprovecharlo con un Ajuste de Actitud, derribando a Rhodes y reclamando el Campeonato de la WWE.

La distracción, como se supo, fue orquestada por una facción de jóvenes estrellas que, según se informa, se han aliado con Cena, viéndolo como un mentor. Esta traición hirió profundamente a Rhodes, quien había elogiado a Cena en las semanas previas a WrestleMania, llamándolo un modelo a seguir y un referente de éxito. El Universo WWE estalló en abucheos mientras Cena celebraba con sus nuevos aliados, mientras que un derrotado Rhodes tuvo que procesar la pérdida de su título y el dolor de la deslealtad. Las publicaciones de los fans en redes sociales reflejaron el sentimiento, y muchos expresaron su indignación por lo que percibieron como una victoria injusta.
Entra Randy Orton, cuya historia con Rhodes y Cena es profunda. Orton y Rhodes formaron parte de la facción Legacy, y Orton fue mentor del joven Rhodes. Aunque su relación ha tenido sus altibajos, Orton ha elogiado constantemente la resiliencia y la ética de trabajo de Rhodes, incluso cuando tomaron caminos separados. El desprecio de Orton por Cena, por otro lado, está bien documentado, y se originó en su intensa rivalidad a finales de la década de 2000 y principios de la de 2010. La Víbora no perdió tiempo en abordar las consecuencias de WrestleMania, tomando el micrófono en el siguiente episodio de Monday Night Raw para lanzar un mensaje mordaz.
“Hablas demasiado, Cena”, gruñó Orton, con su característica intensidad cautivando al público. “¿Crees que puedes volver a entrar sin hacer ruido, robarle el momento a Cody e irte como si nada hubiera pasado? Te equivocas. Ya no se trata de ti. Se trata de justicia para Cody, y yo se la voy a dar”. Las palabras de Orton fueron recibidas con un aplauso atronador, mientras los fans se unían a la idea de que el Máximo Depredador diera un paso al frente para enmendar los errores de WrestleMania. Continuó prometiendo que no solo se enfrentaría a Cena, sino que también le arrebataría el Campeonato de la WWE, asegurándose de que regresara a lo que él llamó “las manos correctas”.
El anuncio ha sentado las bases para una rivalidad de alto riesgo, con Orton programado, según informes, para enfrentarse a Cena en el próximo evento Backlash. Fuentes de la WWE sugieren que este combate podría ser el punto de partida de una trama más amplia que involucra a Rhodes, quien, según se dice, se está recuperando de lesiones leves sufridas en WrestleMania. Si bien Rhodes ha guardado silencio en redes sociales, sus allegados han insinuado que aún no ha terminado con Cena y que está planeando su propio regreso. La posibilidad de una lucha de triple amenaza o un duelo por equipos es inminente, lo que añade más intriga a una situación ya de por sí explosiva.
Para Orton, esta rivalidad representa más que una simple oportunidad de ajustar cuentas. A sus 44 años, la Víbora es consciente de que su tiempo en la cima es finito, y conquistar el Campeonato de la WWE consolidaría su legado como uno de los más grandes de la historia del cuadrilátero. Sus recientes actuaciones han demostrado que sigue siendo una fuerza formidable, con su RKO aún capaz de golpear en cualquier momento. Los fans han recurrido a plataformas como X para expresar su entusiasmo, y algunos predicen que la búsqueda de venganza de Orton podría llevar a una de las rachas más memorables de su carrera.
A medida que se acerca Backlash, el Universo WWE se prepara para un choque de titanes. La promesa de venganza de Orton contra Rhodes ha revitalizado la compañía, mientras que las controvertidas acciones de Cena lo han convertido de nuevo en una figura polarizadora. Queda por ver si Orton podrá cumplir su promesa y conquistar el Campeonato de la WWE, pero una cosa es segura: la Víbora está lista para atacar, y el mundo de la lucha libre está pendiente.