En una declaración que ha sacudido tanto a Hollywood como a Silicon Valley, la actriz Alyssa Milano ha acusado públicamente a Elon Musk, CEO de Tesla y de X (anteriormente Twitter), de haber contribuido al declive de su carrera y a su actual crisis financiera. Según documentos recientemente revelados, Milano está exigiendo una indemnización de 400 millones de dólares, alegando que las acciones y decisiones de Musk han dañado su reputación y estabilidad económica.
De la controversia digital al litigio legal
Todo comenzó en 2022, cuando Milano anunció públicamente que retiraba su apoyo a Tesla, empresa de la cual era usuaria, en protesta por el aumento de discursos de odio en Twitter tras la compra de la plataforma por parte de Musk. En su lugar, la actriz optó por un vehículo de Volkswagen, lo que provocó una gran polémica mediática y en redes sociales.
A partir de entonces, Milano asegura haber sido víctima de campañas de acoso en línea, alimentadas —según ella— por la permisividad de Musk frente a ciertos comportamientos en la red social. “Fui insultada, ridiculizada y acosada sin cesar… todo con la aprobación tácita de un hombre que maneja una de las plataformas más influyentes del mundo”, declaró en una entrevista reciente.
¿Declive profesional?
Milano, conocida por sus papeles en Charmed y ¿Quién manda a quién?, afirma que sus oportunidades laborales se han desplomado desde el inicio del conflicto. Proyectos cancelados, contratos rotos y marcas que se alejaron habrían sido las consecuencias directas del daño a su imagen pública, supuestamente amplificado por el algoritmo de la plataforma bajo el control de Musk.
Según su equipo legal, la plataforma X priorizó deliberadamente publicaciones difamatorias en su contra, lo que incrementó la magnitud del acoso.
¿Acusaciones sin fundamento?
Desde el entorno de Elon Musk no se ha emitido todavía una respuesta oficial. Sin embargo, fuentes cercanas al empresario calificaron las acusaciones como “ridículas y sin base”. “Elon ni siquiera conoce personalmente a Alyssa Milano. Está culpando a otros por las consecuencias de sus propios actos en redes sociales”, dijo una fuente anónima.
Por su parte, los abogados de Milano aseguran haber reunido pruebas sólidas que muestran un vínculo directo entre las políticas de moderación de X y la campaña de odio hacia su clienta. Afirman que llevarán el caso a los tribunales en busca de justicia y reparación.
Un caso que refleja la era digital
El conflicto plantea interrogantes importantes sobre la responsabilidad de las plataformas digitales y sus líderes ante los casos de acoso, así como sobre el enorme poder que poseen los gigantes tecnológicos sobre la imagen y carrera de figuras públicas.
Para algunos seguidores de Milano, se trata de una batalla valiente contra un sistema que protege a los poderosos. Otros, en cambio, consideran que es una maniobra mediática para volver a estar en el centro de atención.
¿Qué pasará ahora?
Mientras los medios se hacen eco de la noticia y las redes sociales arden, lo único claro es que esta disputa entre Alyssa Milano y Elon Musk apenas comienza. El desenlace legal podría sentar un precedente clave en cuanto a la responsabilidad de los ejecutivos tecnológicos frente al contenido y comportamiento en sus plataformas.