El equipo Red Bull Racing siempre está en el centro de la polémica, y esta vez, Christian Horner ha vuelto a generar controversia con su reacción tras las pruebas decepcionantes de Liam Lawson. El piloto neozelandés, quien ha sido considerado como una de las mayores promesas en la escudería, tuvo un desempeño por debajo de lo esperado en sus recientes pruebas, dejando un sabor amargo en el equipo y los aficionados.

Liam Lawson ha sido visto como una de las grandes apuestas para el futuro de Red Bull, especialmente tras su desempeño decente como reemplazo de Daniel Ricciardo en AlphaTauri el año pasado. Sin embargo, en los test recientes, Lawson no logró impresionar, mostrando inconsistencias en su ritmo y varios errores que lo alejaron de los tiempos esperados por la escudería.

Esto generó una reacción inmediata en Horner, quien no dudó en expresar su frustración ante la prensa. Según fuentes cercanas al equipo, el jefe de Red Bull Racing habría tenido un “momento de furia”, exigiendo respuestas sobre el bajo rendimiento del joven piloto.

Christian Horner es conocido por su fuerte carácter y su estilo de gestión implacable. Tras las pruebas de Lawson, Horner declaró: “Esperamos un nivel de excelencia en Red Bull, y cuando un piloto no está a la altura, hay preguntas que deben responderse”.

Esta declaración no pasó desapercibida y encendió un debate en redes sociales, donde muchos fans consideran que Red Bull está ejerciendo demasiada presión sobre sus pilotos jóvenes.

Mientras la situación de Lawson se convierte en tema de conversación, otro factor que ha quedado en evidencia es la creciente antipatía hacia Red Bull en Latinoamérica. La relación de la escudería con los fans latinoamericanos ha sido turbulenta en los últimos años, especialmente tras las polémicas con Sergio “Checo” Pérez.

Muchos seguidores consideran que Red Bull ha tratado injustamente al piloto mexicano, favoreciendo siempre a Max Verstappen. Esto ha alimentado un sentimiento de rechazo hacia la marca y sus directivos, incluyendo a Horner, quien es visto como el arquitecto de esta situación.

En plataformas como Twitter y Facebook, los comentarios sobre la reacción de Horner hacia Lawson se han llenado de críticas. Algunos usuarios afirman que “Horner solo sabe destruir carreras” y que “Red Bull nunca ha sido un equipo justo con sus pilotos”.

A pesar de las pruebas decepcionantes, Lawson sigue siendo un prospecto valioso para Red Bull. Sin embargo, con nombres como Daniel Ricciardo y Yuki Tsunoda en la lucha por un asiento en 2025, el neozelandés podría ver sus oportunidades reducidas drásticamente.

Horner ha dejado claro que en Red Bull “solo los mejores sobreviven”, y si Lawson no logra revertir su situación pronto, podría quedarse sin espacio en la estructura de la escudería. Algunos expertos sugieren que podría buscar oportunidades fuera de Red Bull, con equipos como Williams o Haas observando de cerca su progreso.

La reacción de Christian Horner no ha sorprendido a nadie. Su estilo de liderazgo y la polémica constante en Red Bull lo han convertido en una figura odiada por muchos, especialmente en Latinoamérica, donde los aficionados siguen mostrando su indignación con la gestión del equipo.

Mientras tanto, Liam Lawson enfrenta un futuro incierto. Si no logra mejorar su desempeño pronto, podría pasar de ser una joven promesa a otro talento desperdiciado por la implacable maquinaria de Red Bull. Solo el tiempo dirá si podrá redimirse o si quedará en la lista de pilotos que no lograron encajar en la escudería más controversial de la F1.