El comentarista deportivo de UFC Joe Rogen ha comentado las preocupaciones que tiene por el dos veces campeón de peso pesado Tyson Fury antes de su tan esperada pelea contra Oleksandr Usyk a finales de este mes. Se espera que el “Rey Gitano” busque desesperadamente venganza por su derrota ante el ucraniano, después de que Usyk le infligiera la primera derrota de su carrera profesional el pasado mes de mayo, con una victoria por decisión dividida en Riad. Las dos superestrellas tendrán otra pelea el 21 de diciembre.
Mientras Fury se prepara en las etapas finales de su campo de entrenamiento y parece estar en un estado de venganza, el conocido comentarista deportivo de UFC Joe Rogen habló sobre la pelea tan esperada. Rogen, de 57 años, cree que el campeón británico de peso pesado “ya no es lo que solía ser”.
Según Rogen, los tres partidos contra Deontay Wilder tuvieron un gran impacto en Fury. Aunque el británico no perdió ante el “Bombardero de Bronce”, sufrió muchos daños durante esos partidos. “Fury tenía miedo del poder de Wilder”, dijo Rogen en su podcast. Fue derribado por un fuerte gancho de izquierda y fue sacudido en el octavo asalto. Hermano, esto es lo mismo que vimos en el partido de Usyk. Ya no es lo que solía ser. Esos partidos con Deontay Wilder le quitaron algo. 100%”.
Faltando menos de dos semanas para la revancha entre Fury y Usyk, parece que Fury hará un cambio importante en su estrategia. Según el analista deportivo Gareth A. Davis, ‘The Gypsy King’ tiene como objetivo entrar en la pelea con un peso de 19 piedras y 7 libras (273 libras), que es casi una piedra más que su peso en su primera pelea (18 piedras y 10 libras / 262 libras).
“Cuando Tyson venció a Klitschko hace nueve años, él tenía 27 años, era muy ligero de pies y confundía a sus oponentes con sus largos brazos, su movimiento y su capacidad para atrapar a los boxeadores”, dijo Davis. Añadió: “Esta versión desapareció en los tres partidos con Deontay Wilder, especialmente en el segundo y tercer partido, donde se volvió más poderoso en sus golpes con un peso de 19 piedras y media. “Me dijeron desde su campo interno que tienen la intención de darle ese peso para pelear contra Usyk en este combate”.
Fury y Usyk se enfrentarán nuevamente el 21 de diciembre, mientras Fury busca venganza por su derrota ante el ucraniano en mayo. Una victoria de Fury podría abrir el camino para una gran pelea con su archirrival Anthony Joshua el próximo año.
El “Rey Gitano” reveló recientemente sus planes de golpear fuerte a su pesado oponente, tratando de evitar derrotas consecutivas por primera vez en su carrera profesional. “Voy a entrar en el partido en modo destrucción”, dijo Fury en una entrevista con Undisputed. Y añadió: “La última vez que intenté boxear con él, tuve cuidado… Cualquiera puede recibir un golpe, como vimos en muchos combates de peso pesado”.
Fury continuó: “Pero esta vez, no busco una decisión por puntos. Le golpearé a ese tipo en la cabeza. “Por primera vez en años, entraré al ring en modo desafío, no como campeón”. Explicó: “Creo que siempre soy mejor desafiando las cosas, porque tengo un objetivo que alcanzar y eso me da una gran motivación”.
Esta declaración de Fury supone un cambio radical en su estrategia para el encuentro, ya que suele estar acostumbrado a ganar reteniendo sus títulos. Ahora, parece que Fury se está preparando para entrar a la pelea como si estuviera en modo desafío, con la esperanza de volver a su alto nivel de desempeño.
Fury, considerado uno de los más grandes boxeadores de su tiempo, sabe que esta pelea con Usyk podría ser decisiva para su carrera. Si puede ganar, podría recuperar su confianza y recuperar su lugar como uno de los mejores boxeadores de peso pesado. Por otro lado, Usyk plantea un gran desafío debido a su destacada técnica y gran velocidad en el ring, lo que lo convierte en un oponente muy difícil.
El combate entre Fury y Usyk, que se llevará a cabo el 21 de diciembre, será uno de los combates más emocionantes del mundo del boxeo. Si Fury logra una fuerte victoria, podría abrir la puerta a un combate anticipado contra Anthony Joshua, que será una de las peleas más importantes en la historia del boxeo británico.
A pesar de los enormes desafíos que enfrenta Fury, sus promesas de mejorar y cambiar su estrategia podrían brindarle una gran oportunidad de regresar a la cima. En última instancia, el destino del “Rey Gitano” dependerá de su desempeño en esos momentos cruciales sobre el ring.