Verstappen Acusa a McLaren de Trampa por el Alerón Trasero del Mini DRS en el MCL39

El mundo de la Fórmula 1 está en llamas tras las explosivas declaraciones de Max Verstappen. El tricampeón del mundo ha acusado a McLaren de haber hecho trampa en el Gran Premio de Australia al modificar ilegalmente el alerón trasero del Mini DRS en el MCL39, el monoplaza con el que Lando Norris obtuvo una sorprendente victoria en Albert Park.
Un escándalo que sacude la parrilla
La controversia surgió poco después de la carrera cuando Verstappen, visiblemente molesto, insinuó en una entrevista post-carrera que algo no cuadraba en el rendimiento del McLaren. “No es normal que de la noche a la mañana encuentren tanta velocidad en rectas. Hay algo que investigar”, declaró el piloto de Red Bull.

Según fuentes cercanas al paddock, Red Bull ha solicitado una revisión formal ante la FIA para analizar las modificaciones realizadas en el alerón trasero del MCL39. Se sospecha que McLaren pudo haber introducido un sistema de Mini DRS que no cumple con las regulaciones actuales, permitiendo una reducción ilegal de la resistencia aerodinámica en rectas.
McLaren responde a las acusaciones
Desde Woking, la reacción de McLaren no se hizo esperar. Andrea Stella, jefe del equipo, desestimó los comentarios de Verstappen y defendió la legalidad del MCL39. “Nuestro auto pasó todas las verificaciones técnicas antes y después de la carrera. No hay nada ilegal en nuestro diseño”, afirmó Stella.
Lando Norris, por su parte, se mostró sorprendido por la polémica: “Es triste que cuando alguien más gana, se cuestionen las cosas en vez de reconocer el trabajo duro. Ganamos en pista, con estrategia y ritmo”.
La FIA bajo presión para investigar
La Federación Internacional del Automóvil (FIA) ha confirmado que está analizando la denuncia, aunque no ha emitido un comunicado oficial sobre una investigación formal. Sin embargo, expertos como Gary Anderson y Mark Hughes han señalado que la estructura del Mini DRS de McLaren podría estar en el límite del reglamento técnico.
En caso de encontrarse alguna infracción, McLaren podría enfrentarse a una sanción que incluiría la descalificación de Norris en Australia y una posible restricción en futuras actualizaciones aerodinámicas.
Un golpe estratégico de Red Bull?
Algunos analistas consideran que la queja de Verstappen podría ser parte de una estrategia de Red Bull para ejercer presión sobre la FIA y desestabilizar a McLaren, equipo que ha mostrado una notable mejora en esta temporada. Con Ferrari también en la lucha, el campeonato 2024 se perfila como uno de los más reñidos en la última década.
Mientras tanto, los fanáticos de la F1 están divididos: algunos respaldan a Verstappen y creen que McLaren debería ser investigado a fondo, mientras que otros ven esto como una maniobra política en la lucha por el título.
La siguiente carrera en Suzuka podría ser clave para ver si McLaren mantiene su desempeño o si la FIA decide tomar medidas antes de que el escándalo crezca aún más.