Una emotiva escena se vivió recientemente en una escuela secundaria de Pretoria, Sudáfrica, cuando Elon Musk, el empresario multimillonario y fundador de Tesla y SpaceX, realizó una visita sorpresa a su antiguo colegio. Lo que empezó como un viaje nostálgico se transformó rápidamente en uno de los momentos más conmovedores del año, generando una ola de emociones en redes sociales y en todo el mundo.

Un reencuentro inesperado
Durante una breve estadía en Sudáfrica, Musk decidió visitar su antiguo colegio, Pretoria Boys High School, donde estudió en su juventud. Acompañado por algunos miembros de su equipo y un pequeño grupo de periodistas, Elon recorrió los pasillos de su adolescencia, recordando viejos tiempos.
Lo que no esperaba era encontrar, aún en activo, a su antiguo profesor de física, el Sr. John Matthews, de 79 años, impartiendo clases como lo hacía décadas atrás. Musk quedó visiblemente impactado al ver a su viejo mentor aún trabajando.
79 años y sin jubilarse
Al conversar con él, el Sr. John explicó su situación de forma sencilla pero desgarradora:
“No me queda otra opción, Elon. Mi pensión no alcanza para mantener a mi familia. Mi esposa está enferma y tengo dos nietos a mi cargo.”
Estas palabras conmovieron profundamente a Elon Musk, quien siempre ha mencionado que el Sr. John fue una gran influencia en su vida y en su amor por la ciencia y la tecnología.
“Gracias a él empecé a hacer preguntas, a pensar diferente. Fue uno de los primeros que creyó en mí”, dijo Musk emocionado ante los medios.
Un acto que cambió una vida
Lo que hizo Elon a continuación dejó a todos sin palabras. Tomando la mano de su antiguo maestro frente a estudiantes y periodistas, declaró que asumiría su jubilación completa.
En menos de una semana, Musk anunció públicamente que le otorgaría al Sr. John:
Una pensión vitalicia,
Cobertura total de los gastos médicos de su esposa,
Y un fondo educativo para sus nietos.
Pero no se detuvo ahí. Musk también donó 2 millones de dólares a la escuela, con el fin de construir un nuevo laboratorio de física de última generación, que llevará el nombre del profesor: Laboratorio John Matthews.
Una nación conmovida
El video del encuentro se volvió viral en cuestión de horas. En él, se puede ver al Sr. John rompiendo en llanto, abrumado por la emoción y la generosidad inesperada de su exalumno. La escena tocó millones de corazones en todo el mundo.
En redes sociales, el hashtag #GraciasSrJohn se convirtió en tendencia. Personalidades públicas, docentes y usuarios anónimos celebraron el gesto de Musk.
Un usuario escribió:
“Esto me hizo llorar. A veces olvidamos que detrás de cada genio, hubo un maestro que creyó en él primero. Gracias Elon por recordarlo.”
Una lección de gratitud
Más allá del dinero o la fama, esta historia nos recuerda algo poderoso: la gratitud. Elon Musk no olvidó de dónde vino ni a quién le debe parte de lo que es. En un mundo acelerado, donde los logros personales a menudo eclipsan los recuerdos, Musk eligió detenerse, mirar atrás y decir: “Gracias”.
El gesto no solo cambió la vida del Sr. John, sino que inspiró a millones a valorar el rol de los maestros, a honrar a quienes nos dieron una base y, sobre todo, a actuar con humanidad.