El equipo Gresini Racing se encuentra en una situación tensa tras su victoria en el MotoGP de Japón la semana pasada. El patrocinador principal del equipo de Moto2, QJ Motor, ha pedido el despido de Manuel González después de que el piloto llevara una diadema tradicional japonesa, llamada Hachimaki, en la parrilla antes de la carrera. El Hachimaki, originario de la época samurái, es un accesorio que todavía usan los atletas japoneses, pero su significado se percibe de manera diferente en China, donde se asocia con los ataques japoneses durante la Segunda Guerra Mundial.
QJ Motor admitió que González no tenía malas intenciones, pero aun así pidió al equipo Gresini que dejara de trabajar con el piloto español durante las últimas cuatro carreras de la temporada. González, invitado por los organizadores del evento, usó el Hachimaki y publicó fotos en las redes sociales. Aunque fue un gesto involuntario, provocó protestas del público chino. Poco después, QJ Motor solicitó la eliminación inmediata de imágenes y videos relacionados con González y puso fin a la colaboración.
Hoy, las últimas noticias indican que el logo de QJ Motor ya no es visible en el sitio web del equipo Gresini Moto2, una señal de que la cooperación entre Gresini y QJ Motor parece haber terminado.
Mientras tanto, Marc Márquez, el piloto estrella del equipo Gresini, ha recibido amplios elogios por sus actuaciones con la Ducati este año. Márquez, después de dos temporadas difíciles con Honda, ha empezado a ganar de nuevo y a terminar regularmente en el podio. Gracias a su extraordinaria capacidad de adaptación, modificó su estilo de pilotaje para adaptarse al GP Desmosedici, demostrando que sigue siendo uno de los mejores pilotos del campeonato.
Varios ex corredores, entre ellos Santi Hernández, Alex Crivillé y Jorge Martínez, elogiaron el cambio de Márquez. Hernández, ex técnico de Márquez en Honda, afirmó que el piloto está más tranquilo y controlado que en el pasado, demostrando una gran madurez en el manejo de las situaciones. Crivillé también notó un cambio en el estilo de pilotaje de Márquez, ahora más fluido y menos agresivo respecto a sus años con Honda.
El propio Márquez admitió que la lucha por el título mundial será entre Jorge Martín y Francesco Bagnaia, considerando que ambos son notablemente más rápidos que el resto de pilotos. Sin embargo, Márquez está decidido a luchar por el tercer puesto del campeonato, intentando conseguir los mejores resultados posibles antes de dejar el equipo Gresini.
A medida que la temporada de MotoGP llega a su fin, Márquez tiene la vista puesta en luchar por el podio en las últimas carreras, buscando terminar el año de la mejor manera posible.
