En un giro dramático e inesperado que ha sacudido el mundo del tenis profesional, Vasek Pospisil, cofundador de la PTPA, expresó su sorpresa y decepción por los recientes comentarios de Novak Djokovic sobre una demanda en curso, declaraciones que Pospisil ha calificado como una auténtica traición.

La Asociación de Jugadores Profesionales de Tenis (PTPA), fundada en 2020 por Djokovic y Pospisil como un movimiento para dar mayor voz y representación a los jugadores, enfrenta ahora una grave crisis interna. En el centro de la tormenta se encuentra una demanda interpuesta por antiguos colaboradores y asesores, quienes alegan una supuesta mala gestión financiera y conflictos de interés dentro de la organización.

Durante una rueda de prensa esta semana, Novak Djokovic pareció distanciarse del escándalo legal, al declarar:
“Nunca estuve plenamente involucrado en esas decisiones financieras específicas. Apoyo la misión de la PTPA, pero algunas acciones se tomaron sin mi conocimiento o aprobación.”

Las declaraciones causaron un gran revuelo en la comunidad tenística, pero quizás nadie quedó más sorprendido que el propio Pospisil, quien respondió horas después en una entrevista claramente emocional:
“Siempre estuve del lado de Novak. Construimos la PTPA juntos desde cero, todo lo hicimos con transparencia y confianza. Escucharlo hablar así, como si no supiera nada, me pareció una traición.”

¿Una alianza rota?

Durante años, Djokovic y Pospisil se han presentado como una dupla unida frente a los órganos de gobierno del tenis como la ATP o la ITF. La creación de la PTPA ofrecía una esperanza para muchos jugadores que buscaban mejor representación, mayores premios económicos y condiciones laborales más justas.

Sin embargo, según fuentes internas, las tensiones ya llevaban tiempo creciendo.
“Era cuestión de tiempo que explotara,” dijo una fuente anónima cercana a la organización. “Empezaron con la misma visión, pero con el tiempo sus formas de liderazgo se fueron distanciando.”

La demanda que lo cambió todo

La demanda legal, interpuesta por antiguos asesores e inversores, acusa a la cúpula de la PTPA de ocultar decisiones financieras y de malversar fondos destinados al desarrollo de jugadores. Aunque tanto Djokovic como Pospisil están mencionados en la demanda, las recientes declaraciones del serbio parecen indicar que planea desvincularse de algunas de esas decisiones.

La abogada deportiva Clara Reynolds comentó:
“Djokovic es la cara pública de la PTPA. Es natural que quiera proteger su imagen y legado, y quizás eso explique su necesidad de desmarcarse públicamente.”

Pospisil responde con dureza

Por su parte, Pospisil no está dispuesto a permitir que Djokovic se lave las manos:
“No hubo decisiones ocultas. Todo lo decidimos juntos. Nunca pensé que Novak, precisamente él, insinuara lo contrario. Esto daña nuestra credibilidad y me duele profundamente.”

Ante la pregunta de si este conflicto marca el fin de su relación profesional, Pospisil respondió:
“Espero que no. Pero ahora debo enfocarme en la verdad. Los jugadores lo merecen.”

El mundo del tenis reacciona

Las redes sociales se han encendido con reacciones divididas: algunos acusan a Djokovic de actuar por conveniencia, mientras otros lo defienden argumentando que tiene derecho a protegerse legalmente.

Incluso algunos jugadores del circuito han expresado su escepticismo:
“Si ellos, que son los líderes, no pueden mantenerse unidos, ¿cómo podemos confiar en que representen nuestros intereses?”, dijo un jugador del top 30 que pidió permanecer en el anonimato.

¿Y ahora qué?

Con la demanda avanzando y sus líderes enfrentados, la PTPA se encuentra en una encrucijada crítica. ¿Lograrán reconciliarse Djokovic y Pospisil o este conflicto público marcará el principio del fin para el movimiento?

Lo único claro es que la confianza entre ambos ha sido gravemente dañada — y todo el mundo del tenis está observando con atención.