comienzo en su camino hacia la defensa del título. Con una victoria contundente en dos sets, Sinner demostró por qué es uno de los nombres más temidos del circuito, y lo hizo casi sin despeinarse.
El joven italiano, que ha tenido una temporada sólida y ascendente, entró a la pista con confianza, ritmo y una determinación visible desde el primer punto. Su oponente poco pudo hacer frente al despliegue de potencia, precisión y serenidad que Sinner mostró a lo largo del encuentro.

Con este inicio impecable, el número uno del mundo no solo avanza a la siguiente ronda, sino que también envía un mensaje claro al resto del cuadro: está más listo que nunca para revalidar su corona en el Grand Slam neoyorquino.
Aún queda mucho torneo por delante, pero si algo dejó claro este primer partido, es que Sinner ha llegado al US Open con hambre de gloria y en plena forma. Los fanáticos del tenis ya están atentos a su próximo duelo, con la expectativa de ver hasta dónde llegará el campeón defensor este año.