La primera jornada del Gran Premio de Bahréin dejó a Red Bull con un sabor amargo. McLaren, liderado por un confiado Oscar Piastri, impresionó en la FP2, con Max Verstappen expresando abiertamente sus preocupaciones sobre la velocidad de su RB21. Con una dura advertencia de sólo cinco palabras: “Tenemos el coche más rápido”, Piastri dejó en claro que McLaren está listo para desafiar el dominio de Red Bull. La diferencia entre ambos equipos, estimada por algunos entre 0,7 y 0,8 segundos, ha hecho sonar las alarmas para los actuales campeones del mundo. ¿Qué significa esto para Verstappen y Red Bull en una temporada que ya promete ser una batalla de titanes?

El ambiente en el campamento de Red Bull no era nada optimista después de la FP2. Verstappen, que normalmente encabeza la tabla de tiempos con precisión quirúrgica, terminó en un decepcionante séptimo lugar, casi ocho décimas más lento que el mejor tiempo de Piastri de 1:30.505. El holandés fue inusualmente abierto acerca de las deficiencias de su auto, quejándose de la falta de agarre y un equilibrio impredecible. “Fuimos demasiado lentos, punto”, dijo a la prensa, sin apenas ocultar su frustración. Los informes de radio durante la sesión también revelaron problemas con los frenos, y Verstappen incluso bromeó diciendo que sus largas vueltas se sentían más como derrapes que como carreras. Es un raro momento de vulnerabilidad para el cuatro veces campeón, que está acostumbrado a dominar todos los circuitos.

McLaren, por su parte, irradiaba confianza. Piastri, que ya ganó el Gran Premio de China esta temporada, lideró la carrera con un tiempo de vuelta que no solo fue rápido sino también consistente. Su compañero de equipo, Lando Norris, lo siguió a sólo 0,154 segundos, lo que subraya la fortaleza de McLaren tanto en tandas cortas como largas. El MCL39 parece perfectamente adecuado para el calor y las superficies rugosas de Bahréin, donde el desgaste de los neumáticos juega un papel crucial. Las cinco palabras de Piastri, dichas con una sonrisa durante una entrevista, fueron un golpe directo a Red Bull: McLaren cree que no solo pueden competir, sino dominar. Norris, siempre cauto, matizó el optimismo sugiriendo que los rivales podrían estar reduciendo la potencia de sus motores, pero incluso él no pudo negar que McLaren actualmente lidera el camino.

La dinámica entre los equipos se complica aún más por las luchas internas de Red Bull. El nuevo compañero de equipo de Verstappen, Yuki Tsunoda, tuvo un día desastroso, terminando decimoctavo, a un segundo y medio de Piastri. Tsunoda señaló problemas de comunicación y errores de configuración, pero su actuación expuso la debilidad del dúo de pilotos de Red Bull. Mientras que McLaren se beneficia de que dos pilotos sumen puntos, Red Bull parece depender completamente de Verstappen. En X, los fanáticos ya están especulando sobre una posible repetición del año pasado, cuando Sergio Pérez tuvo problemas con el RB20. “Si Yuki no rinde, Max estará solo contra dos McLaren”, escribió un usuario, un sentimiento ampliamente compartido.

Para Red Bull, Bahréin es una llamada de atención. El equipo sabía que el RB21 tenía problemas con la gestión de los neumáticos en condiciones de calor, como quedó claro durante las pruebas de invierno. Verstappen había advertido de antemano que Bahréin no sería su circuito más fuerte, pero la magnitud del déficit sorprendió incluso a él. El jefe del equipo, Christian Horner, intentó bajar el ánimo subrayando que el viernes era solo un día de pruebas, pero el asesor técnico Helmut Marko fue directo: “Nuestros neumáticos están hirviendo y nos falta velocidad”. El análisis de datos de la noche será crucial para poner a punto el coche para la clasificación, pero el tiempo se acaba.

El ascenso de McLaren no es casualidad. Desde finales de 2023, el equipo ha ido ganando terreno de forma constante y en 2025 busca cosechar los frutos de su desarrollo. Piastri, que subió al podio en Japón, se está convirtiendo en una fuerza formidable, mientras que Norris tiene un rendimiento consistente. Su coche destaca en las curvas de velocidad media, exactamente lo que exige Bahréin. El piloto de Mercedes, George Russell, tercero en la FP2, reconoció la ventaja de McLaren pero insinuó que Red Bull aún puede tener cartas en la mano. Aún así, el consenso parece ser que McLaren es actualmente el equipo a vencer.

Para Verstappen esta es una prueba de su resiliencia. Su victoria en Japón demostró su capacidad para superar los límites de su coche, pero Bahréin exige más que solo talento. Si Red Bull no soluciona los problemas de neumáticos, se arriesga a un fin de semana sin podio, algo raro bajo el reinado de Verstappen. Las palabras de Piastri aún resuenan: “El coche más rápido”. Es un desafío que Red Bull no puede ignorar. El domingo se demostrará si Verstappen puede contraatacar o si el ascenso de McLaren es la nueva realidad en la Fórmula 1.