En un giro sorprendente que ha conmocionado al paddock de MotoGP, el director ejecutivo de Aprilia Racing, Massimo Rivola, ha calificado el fichaje de Jorge Martín como “el error de mi vida” tras el devastador accidente del actual campeón del mundo en el Gran Premio de Qatar 2025. El incidente, que dejó a Martín hospitalizado con un neumotórax y fracturas de costillas, ha ensombrecido los ambiciosos planes de Aprilia para la temporada y ha planteado dudas sobre la decisión de fichar a la superestrella española.
Cuando Aprilia consiguió el fichaje de Martin en junio de 2024, fue aclamado como un golpe maestro. El campeón de MotoGP de 2024, conocido por su ritmo vertiginoso y su implacable consistencia, era visto como el piloto perfecto para llevar la RS-GP de Aprilia a nuevas alturas. El propio Rivola describió el acuerdo como “el contrato más rápido de la historia”, cerrado en tan solo 24 horas tras el desacuerdo de Martin con Ducati. “Estamos encantados de fichar a Jorge”, declaró Rivola radiante en aquel momento, imaginando una alineación de ensueño junto a Maverick Viñales o Marco Bezzecchi.

Pero el cuento de hadas se deshizo antes de comenzar. La temporada 2025 de Martin estuvo plagada de infortunios desde el principio. Un accidente con un highside durante los entrenamientos de pretemporada en Sepang le provocó fracturas en el pie izquierdo y la mano derecha, lo que lo dejó fuera de las tres primeras rondas. Un accidente posterior durante un entrenamiento de supermoto en febrero añadió más lesiones, retrasando aún más su debut. Cuando Martin finalmente regresó para el GP de Catar, se esperaba que el dorsal número uno impulsara la recuperación de Aprilia, que había quedado con tan solo 49 puntos en la clasificación de constructores.

Sin embargo, el GP de Catar se convirtió en una pesadilla. En un momento de infarto entre las curvas 12 y 13, Martin perdió el control en el piano exterior y sufrió un fuerte impacto. Mientras yacía en la pista, la Ducati de Fabio Di Giannantonio lo impactó por detrás, agravando sus lesiones. Di Giannantonio lo calificó como “la peor escena de mi vida”, mientras que Aprilia confirmó que el neumotórax y las fracturas costales de Martin requerirían días de hospitalización. El accidente no solo puso fin a la carrera de Martin, sino que también desbarató la temporada de Aprilia.

La supuesta confesión de Rivola llegó después, una cruda y emotiva reflexión sobre una decisión que en su día parecía inapelable. “El error de mi vida”, según se dice, dijo, palabras que han impactado tanto a aficionados como a expertos. Si bien Rivola ha apoyado públicamente a Martin, elogiando su presencia como “una fuente adicional de motivación” incluso lesionado, este arrepentimiento en privado sugiere frustraciones más profundas. ¿Aprilia sobreestimó la capacidad de Martin para adaptarse a la RS-GP? ¿O el equipo no estaba preparado para los riesgos de fichar a un piloto que se recuperaba de múltiples reveses?
El incidente de Qatar ha aumentado el escrutinio sobre la estrategia de Aprilia. Sin Martin, el equipo se apoyó en Marco Bezzecchi y el novato Ai Ogura, pero los resultados fueron mediocres. Bezzecchi, a pesar de mostrarse prometedor en los entrenamientos, solo sumó 24 puntos en las tres primeras rondas, con dificultades para mantener el ritmo a una vuelta. Ogura impresionó con destellos de brillantez, insinuando el potencial de la RS-GP, pero el tercer puesto de Aprilia, a años luz de los 133 puntos de Ducati, habla de oportunidades desaprovechadas.
El arrepentimiento de Rivola también podría deberse a las repercusiones de la ausencia de Martin. Ducati bloqueó la iniciativa del equipo para cambiar el reglamento y permitir a los pilotos lesionados realizar pruebas privadas, lo que dejó a Martin sin poder probar la RS-GP antes de Qatar. “Si lo intenta en la FP1 y no se siente bien”, había advertido Rivola previamente. “Entonces tendremos una moto menos para todo el fin de semana”. Sus temores resultaron ser proféticos, ya que el accidente de Martin puso de manifiesto los peligros de un regreso prematuro.
Sin embargo, incluso en este momento difícil, hay un atisbo de resiliencia. La determinación de Martin de competir en Catar, a pesar de admitir que “sin duda no estaba al 100%”, demostró el espíritu de lucha que lo convirtió en campeón. Rivola también tiene un historial de recuperación. Su audaz decisión de fichar a Martin, aunque ahora cuestionada, se basó en la visión de desafiar a la élite de MotoGP. “Al proyecto le falta fuerza”, admitió recientemente, pero con la recuperación de Martin en marcha, Aprilia aún podría cambiar el rumbo.
Por ahora, el debate en el paddock es intenso: ¿Fue realmente un error el fichaje de Martin o la desesperación de Rivola una reacción fugaz ante la imprevisibilidad de un deporte brutal? Una cosa es segura: la trayectoria de Jorge Martin con Aprilia está lejos de terminar. A medida que se recupera y la RS-GP evoluciona, el español tiene la oportunidad de demostrar su valía y acallar las dudas. Para Rivola, la redención reside en transformar este “error” en un triunfo que podría definir su legado.