En un giro dramático y sin precedentes en el US Open 2025, el número 2 del mundo, Carlos Alcaraz, ha sacudido al mundo del tenis al negarse a jugar contra la estrella italiana Jannik Sinner, acusándolo de consumir drogas y amenazando con retirarse del torneo si Sinner continúa en el cuadro.

La explosiva declaración —“No juego contra un drogadicto, me retiro ahora”— fue supuestamente realizada en una conversación privada con los organizadores del torneo y luego confirmada por el equipo de Alcaraz. Se trata de uno de los momentos más polémicos del tenis reciente, desatando una tormenta mediática y en redes sociales.
Una tormenta repentina
La controversia comenzó en la víspera de un esperado duelo de cuartos de final entre los dos jóvenes titanes del tenis. Los fanáticos esperaban ansiosamente otro enfrentamiento épico entre Alcaraz y Sinner, cuyas batallas anteriores en Grand Slams se han convertido en clásicos modernos. Pero el partido fue cancelado abruptamente horas antes de su inicio.
Según fuentes cercanas al torneo, Alcaraz se acercó a los organizadores con preocupaciones sobre “exenciones médicas sospechosas e irregularidades en la transparencia antidopaje” que involucraban a Sinner. Aunque no se han hecho declaraciones oficiales sobre pruebas de dopaje fallidas, Alcaraz insistió en retirarse si no se iniciaba una investigación completa.
Palabras fuertes, consecuencias mayores
Las palabras elegidas por Alcaraz —al calificar públicamente a Sinner de “drogadicto”— han generado tanto apoyo como críticas. Su portavoz aclaró más tarde que “Carlos usó el término de manera emocional, no médica”, y que la acusación se basaba en “dudas y rumores que deben tomarse en serio por la integridad del deporte”.
Jannik Sinner, actualmente número 3 del mundo, respondió de manera firme. En un breve comunicado de prensa, declaró:
“Nunca he consumido sustancias que mejoren el rendimiento. Me someto a todas las pruebas antidopaje requeridas y no tengo nada que ocultar. Estas acusaciones son difamatorias y perjudiciales.”
Su equipo legal está evaluando acciones judiciales por difamación.
Respuesta del ATP y del US Open
El ATP y los organizadores del US Open se apresuraron a contener las consecuencias. En una declaración conjunta, afirmaron:
“Todos los jugadores están sujetos a pruebas antidopaje rutinarias y aleatorias bajo los protocolos de la WADA. Hasta el momento, no hay evidencia ni investigación activa relacionada con el Sr. Sinner. Nos tomamos todas las preocupaciones en serio y estamos revisando la situación.”
A pesar de la presión de los fanáticos y patrocinadores, los organizadores confirmaron que Alcaraz no será penalizado por su retiro, aunque podría enfrentar una revisión disciplinaria posterior.
Un mundo del tenis dividido
Leyendas del tenis y jugadores actuales se han pronunciado en redes sociales. Novak Djokovic comentó: “Este es un terreno peligroso. Las acusaciones sin pruebas dañan carreras y al deporte en sí.” Mientras tanto, Nick Kyrgios tuiteó: “Respeto a Carlos por decir su verdad. Si sospechas algo, habla.”
El incidente también ha reavivado el debate sobre la transparencia en los controles antidopaje del tenis. Los críticos argumentan que los protocolos actuales carecen de transparencia pública inmediata y generan espacio para la especulación y la desconfianza.
¿Qué pasará ahora?
Mientras el US Open intenta gestionar el escándalo, el futuro tanto de Alcaraz como de Sinner está en juego. Alcaraz podría enfrentar sanciones o incluso una suspensión por conducta antideportiva, mientras que Sinner probablemente exigirá una investigación formal para limpiar su nombre y proteger su reputación.
Lo único seguro es que la rivalidad entre estas dos estrellas ha tomado un giro amargo, y sus repercusiones podrían redefinir el tenis moderno.
En un deporte que se enorgullece de la elegancia, la disciplina y la integridad, esta disputa podría ser solo el inicio de un ajuste de cuentas más profundo.