Cassie comenzó a salir con Kid Cudi — y lo que hizo Diddy después lo cambió todo. Ella testificó directamente en el juicio contra Diddy.
Lo que parecía ser una historia de amor entre artistas pronto se convirtió en el detonante de uno de los escándalos más sonados de la industria musical en la última década. Cassandra Ventura, más conocida como Cassie, rompió su silencio en una impactante comparecencia ante la corte federal de Nueva York, donde testificó contra su expareja, el magnate musical Sean “Diddy” Combs, revelando detalles perturbadores sobre los episodios que vivió durante y después de su relación con él.
Según lo declarado bajo juramento, Cassie relató que, tras finalizar su relación con Diddy, comenzó a salir con el rapero Kid Cudi a principios de 2012. Lo que en cualquier circunstancia debería haber sido una elección personal y privada, rápidamente se convirtió en el foco de un comportamiento obsesivo y amenazante por parte de Diddy. En la audiencia, Cassie afirmó que, al enterarse de la relación, Diddy estalló en cólera y profirió amenazas directas hacia Kid Cudi, incluyendo una supuesta afirmación de que haría volar su coche.
Lo más escalofriante del testimonio llegó cuando se hizo referencia a un incidente ocurrido poco tiempo después: el coche de Kid Cudi explotó mientras estaba estacionado en su casa. Aunque nunca se presentaron cargos formales en aquel entonces ni se confirmó la participación directa de Diddy, Cassie aseguró que él mismo le confesó haber estado detrás del atentado, como una forma de “darle una lección”.
La declaración de Cassie dejó atónito al jurado y al público presente en la sala. Su testimonio no solo apuntó a un patrón de abuso físico y emocional durante su relación con Diddy, sino que reveló hasta qué punto llegaba su deseo de control y su capacidad para intimidar a cualquiera que se interpusiera en su camino, incluso después del fin de la relación.
Este episodio se suma a una larga lista de acusaciones que han salido a la luz recientemente contra Diddy, incluyendo cargos por tráfico de personas, violencia doméstica y encubrimiento de actividades ilícitas dentro de su imperio musical. La defensa del productor ha negado todas las acusaciones, asegurando que se trata de una campaña de desprestigio, pero los testimonios de figuras como Cassie han puesto en jaque su credibilidad y legado.
Fuera de la corte, la reacción ha sido inmediata. Numerosos artistas y excolaboradores de Diddy han comenzado a distanciarse públicamente de él, mientras que plataformas como Spotify y Apple Music enfrentan presión para retirar su catálogo hasta que se esclarezcan los hechos. Por su parte, Kid Cudi ha preferido no hacer declaraciones oficiales, aunque fuentes cercanas afirman que él también ha sido citado para declarar en la investigación.
Cassie, tras años de silencio, se ha convertido en una voz clave dentro del caso que podría derrumbar a uno de los nombres más poderosos del hip hop. Su valentía al enfrentar a su agresor ante la justicia no solo marca un precedente, sino que enciende una nueva etapa en la conversación sobre abuso de poder en la industria musical.
