El universo de la WWE todavía está lidiando con las consecuencias de Wrestlemania 41, pero el lunes por la noche Raw el 21 de abril entregó otra bomba más cuando Bron Breakker se declaró en el nuevo “Guy de Paul Heyman”, alineándose con Seth Rollins y el legendario gerente en un movimiento que ha reestructurado el panorama de la WWE. El anuncio, hecho frente a una multitud rugiente de Las Vegas, solidificó el ascenso meteórico de Breakker y señaló la formación de una nueva alianza formidable, una que tiene reinados romanos, CM Punk y toda la lista en Alerta Alta. La traición calculada de Heyman en WrestleMania, donde orquestó la victoria de Rollins sobre Reigns y Punk, ahora parece ser parte de un plan más grande, con Breakker como una pieza clave en su visión para el futuro de WWE.

El momento llegó durante el segmento de apertura de Raw, cuando Heyman, micrófono en la mano, presentó a Breakker como “la próxima gran cosa” en la lucha libre. Breakker, que ha estado destrozando la lista desde su debut en la lista principal en 2024, entró en el centro de atención junto a Rollins, exudando confianza. Heyman elogió el poder crudo de Breakker, comparándolo con un joven Brock Lesnar, y declaró que él y Rollins “dominarían el presente y poseerían el futuro”. Breakker, en su primera promoción importante, prometió “lanzar la competencia en el olvido”, llamando específicamente a Reigns por no proteger a Heyman de la facción de línea de sangre Rogue de Solo Sikoa el año pasado. El Jab Drew Boos, pero la intensidad de Breakker silenció a los escépticos, lo que demuestra que está listo para la etapa del evento principal.

Rollins, todavía disfrutando de su triunfo de WrestleMania, dio la bienvenida a Breakker como un “hermano en armas”, insinuando una estrategia a largo plazo para desmantelar a sus rivales. La química del trío era innegable, con la astucia de Heyman, el carisma de Rollins y la fuerza bruta de Breakker creando una dinámica que se siente imparable. Sin embargo, el anuncio provocó una reacción inmediata. CM Punk asaltó el anillo, furioso por la traición de Heyman, solo para ser emboscado por Breakker, quien lo niveló con una lanza que resonó en la arena. Backstage, Becky Lynch, la esposa de Rollins, observó con consternación, su promoción cruda anterior sobre la alianza de su esposo con Heyman ahora agravada por la participación de Breakker. Reigns, ausente del episodio, fue referenciado por Heyman como “un rey sin corona”, alimentando especulaciones sobre su respuesta.
Las redes sociales explotaron, con #Breakkerheyman tendencias mientras los fanáticos debatían si la alianza de Breakker lo eleva demasiado rápido o lo posiciona perfectamente como la próxima megaestrella de la WWE. Algunos elogiaron la capacidad de Heyman para reinventarse, mientras que otros se preocuparon por las posibilidades de Punk y Reigns contra este nuevo trío de potencia. El segmento terminó con Breakker y Rollins de pie, Heyman sonriendo mientras prometía “una nueva dinastía”. Mientras WWE se dirige hacia una reacción violenta, las implicaciones son claras: la llegada de Breakker como un tipo Heyman, junto a Rollins, ha elevado las apuestas, preparando el escenario para una guerra que podría redefinir la compañía. Con el punk prometiendo venganza y Lynch atrapado en el fuego cruzado, el camino por delante promete un caos y batallas inolvidables.