La Fórmula 1 se ha visto sacudida por una nueva polémica tras el anuncio de que los comisarios han reducido la penalización de Max Verstappen luego de un incidente muy discutido durante el Gran Premio de Mónaco. La decisión ha dejado a fanáticos y expertos preguntándose si se está aplicando justicia equitativa, especialmente después de la reciente revelación de George Russell, que podría tener implicaciones serias tanto para las aspiraciones al título como para la credibilidad del sistema disciplinario del deporte.

El incidente polémico

Todo ocurrió en las vueltas finales del Gran Premio de Mónaco, cuando Max Verstappen, piloto de Red Bull Racing, protagonizó una colisión con Lewis Hamilton. El incidente obligó a ambos a modificar su trayectoria en pista, lo que llevó a los comisarios a imponerle una penalización de cinco segundos a Verstappen por causar una colisión evitable. Esa sanción le costó un lugar en el podio.

Sin embargo, días después, los comisarios anunciaron que reducirían la sanción debido a “nuevas pruebas” que, según ellos, modificaban su análisis original. Esta decisión fue inmediatamente criticada, generando acusaciones de favoritismo hacia el piloto neerlandés.

Críticas a la decisión

La reacción negativa no se hizo esperar. Muchos analistas, pilotos y seguidores acusaron a los comisarios de actuar de forma inconsistente y de favorecer a Verstappen por su estatus como contendiente al título.

“Esto sienta un precedente muy peligroso para la Fórmula 1,” declaró Martin Brundle, ex piloto y actual comentarista. “Parece que algunos nombres importantes reciben un trato especial. Necesitamos coherencia en las sanciones.”

Varios pilotos también expresaron su malestar, asegurando que si se tratara de cualquier otro piloto, la penalización no habría sido reducida.

“Es frustrante ver la falta de coherencia. Todos deberíamos ser tratados igual,” comentó Sebastian Vettel.

La revelación de George Russell

Lo que realmente hizo explotar el escándalo fue la revelación de George Russell, piloto británico de Mercedes, quien afirmó tener datos que podrían agravar la responsabilidad de Verstappen en el incidente. Russell, que venía justo detrás de los protagonistas del choque, explicó que su equipo detectó en la telemetría un comportamiento de frenado inusual por parte del Red Bull.

“Tengo acceso a los datos, y muestran una imagen diferente de lo que pasó en pista. Tal vez los comisarios tomaron una decisión apresurada,” dijo Russell en una rueda de prensa.

Su testimonio ha generado llamados a reabrir el caso y revisar el accionar de los comisarios, ya que podría implicar que se benefició a Verstappen injustamente.

Preocupación por el sistema de sanciones

Este episodio no es aislado. En los últimos meses, la inconsistencia en las sanciones ha sido un tema recurrente dentro del paddock. Casos similares han recibido castigos muy distintos, lo que ha encendido las alarmas entre escuderías, pilotos y fanáticos.

Algunos piden una reforma completa del sistema de comisarios, solicitando mayor transparencia, criterios unificados y, posiblemente, la incorporación de inteligencia artificial o tecnología externa en la evaluación de incidentes.

¿Qué sigue ahora?

Por el momento, la FIA no ha hecho declaraciones oficiales sobre la nueva evidencia presentada por Russell. Mientras tanto, muchos esperan que se revise la sanción una vez más, especialmente si el campeonato se define por unos pocos puntos.

Con el campeonato aún abierto, esta polémica podría tener un impacto directo en el resultado final. Y con la confianza del público en juego, la Fórmula 1 enfrenta uno de sus desafíos más delicados de los últimos años.