La Fórmula 1 es un mundo donde la presión es constante, los rumores vuelan más rápido que los monoplazas y las críticas pueden golpear tan duro como una curva mal tomada. En el Gran Premio de Bélgica, Franco Colapinto, el joven piloto argentino de 22 años que ha irrumpido en la escena de la máxima categoría, se encontró en el ojo del huracán. Sin puntos en la temporada 2025 y con especulaciones sobre su futuro en Alpine, el novato enfrentó un fin de semana complicado en Spa-Francorchamps. Sin embargo, en medio de este torbellino, una figura legendaria de la F1, Fernando Alonso, le tendió una mano con dos mensajes que resonaron profundamente, tanto en el paddock como en las redes sociales.

Colapinto llegó a Bélgica como el único piloto de la parrilla sin sumar puntos en 2025, una estadística que, aunque cruda, no cuenta toda la historia. Su transición de la Fórmula 2 a la Fórmula 1 con Williams en 2024 fue prometedora, destacando con un debut sólido en Monza y sumando puntos en Azerbaiyán y Estados Unidos. Pero su paso a Alpine como piloto titular, tras reemplazar a Jack Doohan, no ha sido un camino de rosas. Las dificultades del monoplaza A525, sumadas a problemas mecánicos como el que le impidió largar en Silverstone, han puesto a prueba su temple. Además, rumores sobre un posible reemplazo por Valtteri Bottas o incluso Sergio Pérez para 2026, alimentados por conversaciones entre Flavio Briatore y Toto Wolff, han añadido una capa extra de presión.
En este contexto, la conferencia de prensa previa al Gran Premio de Bélgica se convirtió en un momento clave. Colapinto compartió el escenario con Alonso, el bicampeón mundial de 44 años, y Nico Hülkenberg, un veterano con 37 años. La diferencia de experiencia era abismal: entre Alonso y Hülkenberg suman 652 carreras en la F1, mientras que Colapinto apenas comienza a escribir su historia. Un periodista aprovechó la ocasión para preguntar a los veteranos qué consejo le darían a los pilotos más jóvenes, con el argentino sentado entre ellos. Alonso, con su característica mezcla de sabiduría y franqueza, no dudó en responder: “La Fórmula 1 es un entorno extremadamente competitivo, pero también lo es cualquier deporte de élite. Por lo tanto, tienes que estar preparado para ofrecer tu mejor rendimiento todos los días, y cuando no lo haces, tienes que estar dispuesto a aceptar algunas críticas e intentar mejorar”.

Este primer mensaje de Alonso fue un recordatorio de la dureza del deporte, pero también un voto de confianza en la capacidad de Colapinto para crecer. El asturiano, que conoce al argentino desde sus días en la Fórmula 4 Española, donde corrió bajo su ala en Drivex, no se limitó a palabras genéricas. Su consejo fue directo, pero también reconfortante: “En la Fórmula 1 contamos con mucho apoyo de nuestros equipos, nuestros ingenieros, la tecnología, los datos. Así que no creo que sea un mal lugar para trabajar como piloto e intentar mejorar cada día”. Estas palabras, pronunciadas con la calma de quien ha enfrentado innumerables tormentas en la F1, resonaron como una guía para Colapinto, quien enfrenta críticas por su falta de resultados y rumores que cuestionan su continuidad.

Pero Alonso no se quedó ahí. Durante la misma conferencia, un momento más ligero dejó entrever su apoyo hacia el joven piloto. Cuando Colapinto bromeó sobre la importancia de los fisioterapeutas, diciendo que “los coches empiezan a ser un poco duros para el cuerpo, sobre todo para Fernando un poco más”, el español respondió con una sonrisa y un comentario ingenioso: “Ahora los coches son muy fáciles, los jóvenes no habéis estado antes cuando era todo el rato ir al ataque”. Esta réplica, que desató risas en la sala, no solo mostró la camaradería entre ambos, sino que también fue un guiño a la resiliencia de Colapinto, quien, a pesar de su juventud, está enfrentando los desafíos de la F1 con valentía.
Las críticas a Colapinto no son nuevas. Nelson Piquet Jr., ex piloto de F1, señaló en el podcast Pelas Pistas que el argentino “parece haber perdido la cabeza”, comparándolo con Daniel Ricciardo y sugiriendo que su problema no es la falta de talento, sino una barrera psicológica. “No es lento, ya lo demostró en sus tres primeras clasificaciones consecutivas sin experiencia en F1. Pero algo le afecta mentalmente”, afirmó Piquet Jr. Estas palabras, aunque duras, reflejan la presión que enfrenta un novato en un entorno donde cada error es magnificado. Sin embargo, Alpine ha salido en defensa de Colapinto. Tras el abandono en Silverstone, donde un problema en la transmisión lo dejó sin correr, el equipo desmintió rumores que lo culpaban por quemar el embrague, afirmando: “Fue un problema en la transmisión lo que impidió que Franco pudiera salir desde los boxes. Cualquier otra información es solo especulación”.
El respaldo de Alpine no se limita a comunicados oficiales. En las redes sociales, el equipo ha destacado a Colapinto, publicando mensajes como “Contigo en cada paso del camino” y mostrando imágenes del argentino junto a Pierre Gasly, su compañero de equipo. Este apoyo es crucial en un momento en que los rumores sobre Bottas y Pérez amenazan con desestabilizarlo. Además, datos de la cuenta especializada DeltaData muestran que Colapinto está a solo 0.001 segundos de promedio de Gasly en condiciones de aire limpio, una estadística que subraya su competitividad a pesar de los resultados.
El Gran Premio de Bélgica representó una oportunidad para que Colapinto demostrara su valía. El circuito de Spa-Francorchamps, con su icónica curva Eau Rouge, es un desafío para cualquier piloto, pero especialmente para un novato que busca redimirse. Aunque los resultados no fueron los esperados, la evolución de Colapinto es innegable. Su capacidad para gestionar neumáticos y lograr parciales competitivos, como en Austria, demuestra que el talento que lo llevó a ser campeón de la F4 Española y a destacar en Williams sigue intacto.
El camino de Colapinto en la F1 está apenas comenzando, y las palabras de Alonso son un faro en medio de la tormenta. El bicampeón, que ha enfrentado sus propios altibajos, sabe lo que significa ser cuestionado y salir adelante. Su apoyo, tanto en lo profesional como en lo personal, es un recordatorio de que en la F1 no solo se trata de velocidad, sino de resistencia mental. Mientras los rumores sobre su futuro persisten, Colapinto tiene una oportunidad de oro para demostrar que pertenece a la élite. Con el respaldo de Alonso, Alpine y sus fanáticos, el argentino está listo para escribir el próximo capítulo de su historia en la Fórmula 1, un capítulo que promete emociones y, quién sabe, tal vez un primer punto en la temporada.