EXCAVACIÓN HISTÓRICA: Chozas de huesos de mamut de 16.000 años de antigüedad descubiertas por ARQUEÓLOGOS en Mezhyrich, Ucrania
En un hallazgo arqueológico extraordinario, un equipo de investigadores ha descubierto chozas construidas con huesos de mamut en el sitio de Mezhyrich, en Ucrania. Estas estructuras, que datan de aproximadamente 16.000 años, han proporcionado valiosa información sobre las técnicas de construcción de las antiguas sociedades humanas y su relación con el entorno en el que vivían.
El descubrimiento fue realizado por arqueólogos de la Universidad de Kiev, quienes llevan años excavando en esta región conocida por ser un punto clave para entender la vida de los pueblos prehistóricos. Las chozas, que se encuentran en un excelente estado de conservación, están formadas principalmente por huesos de mamut, así como dientes y colmillos de estos grandes animales. Según los expertos, estos materiales fueron utilizados de manera ingeniosa por los seres humanos de la época, quienes los emplearon no solo para construir sus viviendas, sino también para crear herramientas y utensilios.
Las chozas de Mezhyrich son una muestra impresionante de la capacidad de adaptación de los grupos humanos durante la Edad de Piedra, particularmente en un período de clima extremadamente frío. Las estructuras, que se estima que tenían una forma circular, habrían sido viviendas comunitarias donde los cazadores-recolectores se protegían del duro invierno europeo, caracterizado por la última glaciación. Los arqueólogos sugieren que estas chozas proporcionaban un espacio cálido y seguro para los miembros de la tribu, al mismo tiempo que les permitían aprovechar al máximo los recursos disponibles en su entorno, como los mamuts, que eran cazados para obtener carne, piel y huesos.
Además de los restos de las chozas, los investigadores han encontrado una variedad de herramientas de piedra y hueso, lo que sugiere que los habitantes de Mezhyrich eran expertos en la fabricación de utensilios para la caza, la pesca y la vida diaria. Este descubrimiento refuerza la teoría de que los seres humanos prehistóricos no solo sobrevivían, sino que también eran capaces de prosperar en condiciones extremas, utilizando su ingenio y adaptabilidad.
El hallazgo ha capturado la atención de la comunidad científica, ya que las chozas de huesos de mamut de Mezhyrich son uno de los pocos ejemplos conocidos de este tipo de construcción en el mundo. Los arqueólogos destacan la importancia de este descubrimiento para entender mejor las estrategias de subsistencia y las relaciones sociales de los primeros seres humanos.
La excavación en Mezhyrich también ha revelado indicios de una vida comunitaria fuerte y cooperativa. Las chozas eran de tamaño considerable, lo que sugiere que varias familias pudieron haber vivido en cada una de ellas, compartiendo recursos y trabajando juntas para sobrevivir. Los estudios posteriores podrían arrojar más detalles sobre las costumbres y rituales de estos pueblos prehistóricos.
Este hallazgo es un testimonio más de la increíble habilidad de nuestros ancestros para adaptarse a los desafíos de su entorno, utilizando los recursos naturales de manera innovadora y sostenible. A medida que continúan las excavaciones, los arqueólogos esperan descubrir más secretos de Mezhyrich que puedan arrojar nueva luz sobre la vida en la Europa prehistórica y el papel crucial que los mamuts desempeñaron en la historia de la humanidad.
