El esperado combate de peso pesado entre Tyson Fury y Oleksandr Usyk, programado para el 21 de diciembre, ha sido cancelado en un giro inesperado que ha dejado a los fanáticos del boxeo completamente sorprendidos. La razón detrás de esta cancelación es una grave lesión sufrida por Usyk durante una sesión de entrenamiento, que lo ha dejado fuera de combate y ha puesto en pausa lo que se perfilaba como uno de los enfrentamientos más grandes en la historia del boxeo.
Según los informes de su equipo, Usyk sufrió una “lesión espantosa” mientras se preparaba para su enfrentamiento con Fury. Aunque los detalles específicos aún no se han revelado, se ha confirmado que la lesión ocurrió durante un entrenamiento en Ucrania, justo antes de la última fase de su preparación para el combate. Fuentes cercanas aseguran que la lesión involucra el hombro de Usyk, lo que le impide entrenar con la intensidad necesaria para la pelea.
El equipo de Usyk emitió un comunicado en el que confirmaba que el campeón ucraniano había sido evaluado por médicos y que necesitaría un tiempo considerable de recuperación. “Lamentablemente, Oleksandr ha sufrido una lesión grave que lo obliga a abandonar el combate del 21 de diciembre”, se leía en el mensaje. “Estamos priorizando su salud y tomaremos todo el tiempo necesario para que se recupere adecuadamente antes de regresar al ring”.
Para los fanáticos del boxeo, esta noticia es un golpe devastador. El enfrentamiento entre Fury, campeón invicto del WBC, y Usyk, campeón unificado, era esperado con gran expectación, ya que se preveía que decidiría al campeón indiscutido de los pesos pesados.
Tyson Fury, quien había mostrado gran entusiasmo por el combate, reaccionó rápidamente a la cancelación. En sus redes sociales, el campeón británico expresó su decepción, pero subrayó la importancia de la salud de Usyk. “Estoy devastado por la cancelación, pero la salud de los luchadores es lo más importante”, dijo Fury. “Espero que Usyk se recupere rápidamente y que podamos pelear en el futuro cuando esté al 100%”.
El “Rey” Fury también añadió que se mantendría activo y listo para pelear en 2024. “No voy a quedarme de brazos cruzados esperando. Si Usyk no puede pelear, estoy preparado para enfrentar a cualquiera que esté dispuesto”, afirmó, dejando abierta la posibilidad de un nuevo combate ante otros contendientes del peso pesado, como Deontay Wilder o Anthony Joshua.
La cancelación del combate ha dejado al mundo del boxeo en vilo. Este enfrentamiento, que había estado en la mente de todos durante meses, estaba marcado como un clásico instantáneo. Fury, conocido por su estilo excéntrico y su poder físico, se enfrentaba a Usyk, un boxeador técnico y astuto que ha demostrado su grandeza en su lucha contra Anthony Joshua y otros contendientes de élite.
Ahora, con el combate cancelado, surgen muchas preguntas sobre qué ocurrirá en el futuro de la división de los pesos pesados. Fury, que ya se había enfrentado dos veces a Deontay Wilder, podría optar por una tercera pelea con el estadounidense, quien sigue siendo una de las figuras más temidas en la categoría. También se rumorea que Anthony Joshua, quien aún busca recuperar su corona, podría ser el siguiente en la fila para enfrentarse a Fury.
Usyk, quien había estado en la cima de su carrera tras unificar los títulos de los pesos pesados, ahora enfrenta un período de incertidumbre. La lesión que lo ha dejado fuera de este combate podría retrasar su ansiado enfrentamiento por el título indiscutido, un sueño que tenía en mente desde que ascendió a los pesos pesados.
Aunque no se ha dado un plazo oficial para su regreso, el equipo de Usyk ha asegurado que el campeón tomará todo el tiempo necesario para sanar y regresar más fuerte que nunca. Sin embargo, la pregunta sigue en pie: ¿Cuánto tiempo tardará en estar completamente recuperado y cuándo podrá retomar su carrera?
Mientras tanto, la división de los pesos pesados sigue siendo un hervidero de especulaciones. Con Fury al acecho y otros contendientes de alto nivel como Wilder y Joshua listos para asumir los retos, la batalla por el título indiscutido está más abierta que nunca.
Si bien la cancelación de este esperado combate entre Fury y Usyk es un golpe para los fanáticos del boxeo, la promesa de una futura pelea entre estos dos titanes sigue siendo una posibilidad a largo plazo. La división de los pesos pesados está lejos de haberse decidido, y con figuras como Fury, Usyk, Wilder y Joshua en la mezcla, el futuro de este deporte promete ser tan emocionante como incierto.
A medida que los fanáticos esperan más detalles sobre la recuperación de Usyk y los próximos pasos de Fury, la espera por el combate que muchos consideraron el “combate del siglo” continúa, con la esperanza de que el esperado enfrentamiento entre Fury y Usyk se materialice cuando ambos estén en su mejor forma.